Se escapo la victoria en los minutos finales

C.B. VILLARROBLEDO 81 Promociones Renova Uno 72

C.B. VILLARROBLEDO:

Pérez, Requena, Ortega (9), Jareño, Melero (21), Andersson , Santos (20), Navarro (20),

Hergueta (4), Martínez (7), Lapaz y Collado

PROMOCIONES RENOVA UNO:

Adrián (6), Alberto (16), Manu, Francisco Javier (1), Juanan (4), Miguel (16),

Carlos Jesús (2), Sebas (12), Pedro (6), Fernando (2) y Nieto (6)

PARCIALES: 1º (23 – 14), 2º (15 – 29), 3º (12 – 9) y 4º (31 – 19).

Partido correspondiente a la decimosexta jornada de la liga Junior Preferente Cantenet Grupo B que enfrentaba a CB Villarrobledo y a Promociones Renova Uno en el Pabellón Barrio de los Pintores a las 17:30 horas del Domingo. Encuentro con el liderato de la competición en juego con una sana rivalidad deportiva, demostrando ambos conjuntos el porqué se encontraban en lo más alto de la clasificación. Buen ambiente en las gradas con muchos aficionados de La Solana que se desplazaron a Villarrobledo a arropar a su equipo.

El partido comenzaba con muchos nervios tanto en el equipo local como el visitante que se traducían en imprecisiones y precipitaciones. Era el Villarrobledo el que se encargaba de inaugurar el marcador pero un triple de Miguel y una canasta de Nieto adelantaban a los nuestros por primera vez en el partido. A partir de este momento aunque los solaneros eran capaces de atacar con cierta solvencia la zona 2-3 planteada por el equipo roblense, pagaron caro algunos despistes en el balance defensivo, ya que el equipo local no se lo pensaba dos veces y salía rápido al contraataque, recordando al estilo del Real Madrid de los años 80 de Lolo Sáinz con un jugador de palomero que solía ser Juanma Iturriaga. Al final se llegaba con 9 puntos de ventaja para el equipo del CB Villarrobledo (23 - 14).

En el segundo cuarto tocaba ajustar un poco la defensa para evitar canastas fáciles y recuperar un poco la frescura habitual en ataque. En los dos primeros minutos de este

período Villarrobledo conseguía una ventaja de 11 puntos (27 – 16) y después de unos momentos con intercambios de canastas se produjeron los mejores instantes de los chicos de La Solana. Siendo fieles a su juego, se peleaban los balones en defensa como si fuera el último y se empezó a jugar rápido en el contraataque (tres de ellos convertidos por Pedro). Desde el perímetro también aparecieron Sebas (tres triples seguidos sin fallo) y Alberto que anotaba desde más allá de 6,25 para poner la guinda a este cuarto y marcharse al descanso con 5 puntos de ventaja (38 – 43) habiendo conseguido un parcial de 2 – 16.

El tercer cuarto empezaba con los chicos de La Solana sin convertir ningún punto en cinco minutos, a pesar de esta situación la buena defensa solanera hacía que el equipo local no obtuviera mucha rentabilidad. Tuvo que ser de nuevo Sebas, que salía desde el banquillo, con un triple quien se encargara de romper la sequía anotadora de los solaneros y empatar el partido (46 – 46). Al final del cuarto La Solana seguía mandando en el electrónico (50 – 52).

El último cuarto transcurrió con continuas alternancias en el marcador hasta el final. De esta manera Villarrobledo se adelantaba 53 – 52 con un triple a tabla de Navarro, después de una canasta de Miguel para poner el 53 – 54 y una falta provocada en ataque en la siguiente acción, hizo que se produjera una circunstancia un poco surrealista porque el colegiado principal señaló de inmediato una técnica al banquillo solanero por levantarse dos jugadores y aplaudir la buena acción defensiva que se había producido (está grabado en video y se puede utilizar en un clinic de arbitraje como ejemplo de cómo un colegiado se quiere convertir en protagonista en un partido donde los actores principales deben ser siempre los jugadores). Después de cortar el ritmo de juego, regalando dos tiros libres y una canasta con tiro adicional posterior al equipo local, los solaneros siguieron metidos en el encuentro y conseguían llegar ganando 61 – 64 a falta de 3 minutos para la conclusión del choque. A partir de ahí una serie de errores en ataque, que con un equipo como Villarrobledo no se pueden permitir, propiciaban contaataques de los locales para convertir canastas o tiros libres por faltas personales. A falta de un minuto se llegaba con 72 – 64 en el electrónico pero todavía no se había tirado la toalla porque 5 puntos seguidos de Alberto (un triple y robo de balón para convertir canasta) dejaba el marcador a tan sólo 3 puntos (72 – 69) con 40 segundos aún por disputar. Al final los tiros libre convertidos por los roblenses y un triple de Melero en el último segundo, a tabla de nuevo, desde 8 metros dieron la puntilla a los nuestros que hicieron un partido serio dando la cara en todo momento y que a punto estuvieron de conseguir la victoria.